Utilizar el rubor parecería ser bastante fácil, ¿verdad? Sin embargo, va más allá de sonreír y aplicar un bonito color rosa en el centro de las mejillas. De hecho, hay algunos errores comunes que podrías estar cometiendo al aplicar tu producto favorito para disimular el rubor y que podrían llevar tu look al territorio de los payasos. Así que, evita los siguientes errores de rubor y descubre qué hacer en su lugar.
Error 1 con el rubor: Usar el color y el acabado equivocados
La forma más rápida de asegurar un mal día con el rubor es elegir el tono y el acabado equivocados para tus rasgos. Como con cualquier artículo de cosmética de color, no elijas uno solo porque te llame la atención. Es importante elegir un rubor que se adapte a tu tono y textura de piel. Si tienes poros dilatados o imperfecciones, por ejemplo, un rubor con brillo o purpurina puede llamar la atención sobre las irregularidades. En estos casos, un rubor mate podría ser una mejor opción.
A la hora de decidir el color, intenta encontrar un tono que imite tu rubor natural. Si tienes la piel clara, el rosa bebé pálido te quedará genial. Las pieles de tono medio pueden lucir un sutil rubor baya, mientras que las pieles oliva estarán encantadoras con tonos durazno cálidos. Los tonos de piel más oscuros pueden ser más atrevidos: los ciruelas y rojos intensos quedarán bien con tu tez. L’Oréal Paris True Match™ Blush está disponible en 12 tonos que favorecen la piel, desde tonos fríos a neutros y cálidos.
Error 2 con el rubor: Poner crema sobre polvos
Mezclar las texturas equivocadas puede ser perjudicial para tu look en general. Si ya te has empolvado la cara, asegúrate de no añadir rubor en crema o gel por encima, ya que podría crear un efecto confuso. Esto significa que siempre debes combinar una base de maquillaje en polvo con un rubor en polvo. Las cremas, por su parte, pueden usarse con éxito sobre la piel desnuda o encima de fórmulas en crema o líquidas.
Error 3 con el rubor: Poner polvos sobre la base de maquillaje líquida
Al igual que en el punto anterior, la superposición de polvos sobre un líquido puede no quedar muy bien. Si usas una base líquida, una crema hidratante con color o una BB cream, no añadas rubor en polvo directamente encima. Utiliza un rubor en crema en su lugar, o utiliza polvos pero fija tu base primero con polvos fijadores. Si te saltas este paso, el color puede quedar irregular y hacer que el resto del maquillaje se desplace.
Error 4 con el rubor: Aplicarlo en el lugar equivocado
El lugar del rostro en el que se coloca el rubor es realmente importante. En la mayoría de los casos, el producto debe estar centrado, empezando junto a la oreja y avanzando hacia las mejillas. Si se difumina demasiado alto, demasiado bajo o demasiado cerca de la nariz, se corre el riesgo de parecer rubicundos. Aplicar demasiado abajo también puede hacerte parecer mayor. Focaliza el rubor en los lados del rostro y difumínalo hacia dentro, ya que esto puede ayudar a crear un rubor de aspecto natural.
Error 5 con el rubor: No tener en cuenta la forma del rostro
La forma de tu rostro debería dictar cómo aplicar el rubor. Si tienes una cara cuadrada, el rubor quedará mejor aplicado solo en las mejillas, para ayudar a suavizar una mandíbula marcada. Si tienes la cara redonda, aplica el rubor a lo largo de los pómulos para conseguir un efecto afinante y añadir definición a las mejillas. ¿Tienes una forma de cara estrecha? Puede equilibrarse con la aplicación horizontal de rubor. Y si tienes forma de corazón, deberías aplicar rubor debajo de los pómulos para ayudar a distraer la atención de una barbilla afilada.
Error 6 con el rubor: Usar demasiado producto
¡No te pases con el rubor! Si se aplica demasiado, se pierde el objetivo de utilizar rubor, que es crear un rubor auténtico. Utiliza un rubor transparente y modulable y aplícalo con ligeras pinceladas. Comprueba siempre tu rubor con distinta luz antes de salir de casa para saber si aplicaste demasiado. Si tienes una ventana que deje entrar la luz, la luz del sol es la mejor prueba de realidad para tu maquillaje. Si te das cuenta de que has ido demasiado lejos, difumínalo con un toque de polvos traslúcidos.
Error 8 con el rubor: Saltárselo por completo
Descuidar las mejillas no es forma de maquillarse. Añadir rubor a tu rostro puede hacer que parezcas más viva y vibrante al instante, ¿quién no querría eso?